En un país con una de las tasas más altas de muertes por ahogamiento, enseñar a nadar es mucho más que una actividad recreativa: es una cuestión de protección y de vida. Por eso, en la YMCA de São Paulo, con el apoyo de Delta Air Lines, lanzamos la Academia de Natación, un programa que va más allá de lo deportivo.

No se trata solo de aprender técnicas, sino de construir una cultura de prevención desde la infancia, con la participación activa de las familias. Y eso es lo que hace que este proyecto sea tan valioso.

Uno de los momentos más especiales de este programa es el evento de cierre, que con los años se ha convertido en una tradición muy esperada por nuestros socios. Las familias lo viven con emoción porque combina el progreso técnico de los niños con el juego, la alegría y la conexión familiar. El ambiente que se genera es de celebración, creatividad y orgullo compartido.

Gracias al apoyo sostenido de Delta Air Lines, hemos podido mejorar esta experiencia con detalles que marcan la diferencia. Cada año, incorporamos elementos que hacen que el evento sea verdaderamente mágico para los niños y sus familias. Y eso, sin duda, los motiva a seguir aprendiendo y participando activamente.

Este programa no solo salva vidas, también promueve hábitos saludables, fortalece vínculos familiares y nos recuerda que el deporte puede ser una herramienta poderosa para el desarrollo integral. Como YMCA, seguimos comprometidos con generar entornos seguros, inclusivos y saludables. Ver el impacto en cada niño y en cada familia es lo que nos impulsa a seguir.